Entonces, ¿cómo funciona? Los mejores resultados son lentos y firmes, con la cantidad justa de ejercicio cardiovascular y levantamiento de pesas. De esa manera puedes tonificar (añadir el músculo para aumentar el metabolismo de tu cuerpo) y quemar (quitando la grasa a lo largo del camino). Tres comidas al día, con dos bocadillos saludables y un régimen de entrenamiento con pesas esculpirán tu cuerpo en forma como lo haría un escultor con experiencia. La paciencia es clave, junta con constantemente empujar tu cuerpo hacia nuevos niveles cada vez para que puedas obligarlo a hacer cambios positivos.

¡Las pulgadas perdidas sin pérdida de peso, es igual a nada! Deja de pensar que la grasa fue sustituida por musculo. En algunos casos extremos, esto puede ser cierto. Pero vamos, seamos sinceros, es más probable que estés construyendo más castillos en el cielo con esos pensamientos. Recuerda esto: “‘Todo me está permitido» -, pero no todo es beneficioso. «Todo me está permitido» -, pero yo no me dejaré dominar por nada… Por lo tanto, honra a Dios en vuestro cuerpo. “(1 Corintios 6:12, 20b).

Puedes hacerlo todo (comer mal, fumar, beber, llevar una vida sedentaria), pero tal vez no sea lo mejor para ti. Haz esas cosas que te beneficiarán ahora y también a largo plazo. Un cuerpo sano hace precisamente eso.

1 2

About The Author