Utiliza el contacto pacífico con los niños La ciencia del contact humano Más de un siglo de investigación científica y observación proporciona evidencia de lo que muchos saben por instinto: El tacto es esencial para el crecimiento y desarrollo humano. En 1915, los estudios psicológicos realizados en orfanatos y guarderías demostraron que la falta de crecimiento en los bebes lactantes y niños pequeños está directamente vinculada a la falta de contacto humano, incluso cuando la nutrición es suficiente y se les proporciona atención médica. Los estudios de Harlow, llevados a cabo en monos durante la década de 1950, demostró claramente la necesidad de afecto táctil en el desarrollo social y cognitivo. En los estudios de Harlow participaron dos grupos de changos o monos. En el primer grupo, la “madre felpa” nunca les daba comida, mientras que la “madre de alambre”, siempre los alimentaba dándoles leche del biberón. En el segundo grupo, sólo la madre felpa les proporcionaba alimentos. Los monos jóvenes se aferraron a la madre felpa, aunque les diera comido o no. De hecho, los bebés monos sólo iban con la madre de alambre cuando tenía comida y rara vez se quedaban más tiempo del que les tomaba obtener el alimento necesario. Cuando la madre felpa tenía la botella, no iban con la madre alambre para nada. Los monos bebés claramente prefirieron las caricias de la tela más suave. Obstáculos para el toque pacífico en la vida diaria de los niños De acuerdo con Dori Sargent, una facilitadora y entrenadora de Peaceful Touch® en los Estados Unidos, los profesores que utilizan PT frecuentemente reportan transformaciones en el comportamiento de algunos de sus alumnos más difíciles. Sin embargo, en los Estados Unidos, muchos sistemas escolares tienen una póliza de “no-tocar” por temor a acciones legales o debido a las diferencias culturales en relación con el tacto. Sin embargo, la Asociación Nacional para la Educación de Niños Pequeños (NAEYC por sus siglas en inglés) requiere un contacto saludable y positivo en sus criterios de acreditación. El personal docente es animado a expresar afecto a través de conductas como el afecto físico, el contacto visual y el tono de voz.
