Dime qué te duele y te diré qué piensas Lo que sea que observas en el mundo se afianza en ti, y sin embargo lo que ves del mundo es siempre consecuencia de lo que piensas de manera persistente, por ello ejercítate en pensar positivo todo el tiempo y llenar la mente de bendiciones para todos, pues esa será tu garantía de que el mundo ira amoldándose a tu visión, entregándote cada vez mas y mas bendiciones. -¿Como podría ser positiva cuando me acaban de robar 20,000 dólares?- Me dijo hace unos meses una estudiante de los cursos que dicto en California. -¿Cómo podrías no serlo si fuiste creada abundante y feliz?- Le respondí. Entiendo el monto de la pérdida material, pero el mundo que observas es solo un efecto y la causa de la abundancia del mundo se encuentra en tu mente, por lo que lejos de caer en sufrimiento emocional y verte en carencia frente a las situaciones de dificultad, confía en que esto solo ha ocurrido para fortalecer tu fe en el poder que ya reside en tu interior. Al poco tiempo esta señora hizo una transacción comercial que con muy buena estrella significó una enorme ganancia para ella, lo que le permitió triplicar el monto de lo que ‘aparentemente’ había perdido. Y puse la palabra ‘aparentemente’ entre comillas porque los pensamientos de pérdida nos dan la apariencia de un mundo amenazador en el que se carece de lo necesario, pero basta cambiar esos pensamientos y mantenernos en la confianza para que el mundo vuelva a entrar en balance y nuestra abundancia de pensamientos positivos se exprese aun con mayores ganancias. El mundo que observas lleno de alegrías y dificultades, salud y enfermedad, tiene su causa en los pensamientos que sostienes de manera persistente, por ello me atrevo a repetir que lo que te duele física o emocionalmente esta en tu mente y no allá afuera, y que si cambias de mentalidad hacia lo positivo tus resultados solo pueden ser extraordinarios y felices. Cuando las circunstancias te ‘expriman’ como a un limón, piensa y da lo mejor de ti y esa será la garantía de que más temprano que tarde llegaras al destino de luz que habías estado esperando, pues la buena estrella alumbra sobre las cabezas de aquellos que tomando responsabilidad de lo que piensan orientan todos los recursos de sus mentes a la construcción de lo positivo. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X