meditacion-vipassanaPor Prem Dayal

En la visión de Osho y en mi experiencia la terapia que facilito todo el año es solo una preparación a la meditación. La terapia es importante obviamente, pero solo para dar algo para masticar a la mente hasta que se canse. El terapeuta, a menos que te considere una inversión para su futuro, tiene solo que confortarte un poco esperando el momento en que estés listo para ser acompañado desde el sillón de su consultorio a la puerta del mismo; y de allí darte su bendición para que tu recuperes la dignidad, la responsabilidad y el orgullo de enfrentar tu propia vida con madurez. Esto es el momento para la meditación.

Hay muchas técnicas de meditación, pero siento decirte que la Vipassana no es una meditación si no LA MEDITACION.

De hecho en todas las técnicas que merecen el nombre de “meditación” hay algo de la Vipássana. Podríamos decir que la Vipássana quita lo que no es esencial de las otras técnicas y se queda con solo la esencia. Cual es la esencia? El atestiguar.

Ser consciente no significa portarse bien, sino significa “ser consciente de lo que es”. En un cierto sentido la conciencia es mucho más cercana a la ciencia que a la religión, y de hecho alguien puede acceder a las cumbres de la conciencia desde donde se puede ver el horizonte del divino, sin adecuarse a ninguna doctrina, sin venerar ningún objeto de culto, sin tener un libro sagrado y mas que todo sin tener que doblar su inteligencia a creencias medievales.

Ser consciente significa simplemente atestiguar lo que es sin interferir: observar, quedarse consciente y basta. Cuando en Vipássana estás sentado, despierto, con los ojos cerrados y sin hacer nada, lo único que puedes observar a parte de los ruidos del mundo exterior son las tres variantes del mundo interior: la mente, las emociones y las sensaciones físicas.

Para ponérla más leve nos quedaremos con la primera: La mente.

Entonces, quedándote un buen ratote sentado sin hacer absolutamente nada, ¡pero quedándote despierto! te resultará muy evidente un fenómeno: hay un montón de pensamientos que transitan en la pantalla de tu mente. Estos pensamientos son muy fugaces: ahora hay uno, y un momento después hay otro, y después llega uno bonito y un momento después uno de la patada…