La psicología de comer ¡Ya te darás una idea! Cualquiera cosa se puede asociar con la mala alimentación. Pero hay algo en particular que conduce al deseo del azúcar y esto es el azúcar en la sangre, o la falta de ella. Azúcar en la sangre o glucosa es la fuente principal del combustible del cerebro. ¡Malas noticias! Porque si el azúcar en la sangre está bajo, el cerebro comienza a entrar en pánico, señalando al estómago y al cuerpo que es hora de comer. Los estudios han demostrado que cuando el azúcar en la sangre es muy bajo, la corteza prefrontal del cerebro (el área responsable de decirte que dejes de comer) está inactiva, lo que te permite comer todas esas costillas o un helado enorme. Lo único que te detiene es el reflejo de estiramiento de tu estómago. Si tienes un estómago grande, entonces necesitará un estómago lleno para que pares de comer, lo cual generalmente implica que comerás una gran cantidad de comida. Entonces, ¿qué debes hacer? Come más a lo largo del día, llénate de comidas con alto contenido en proteínas y fibra para que puedas mantener el azúcar de tu sangre en niveles normativos durante el día. Esto te ayudará a evitar comer como loco. Con el tiempo, añade el ejercicio y el control de las porciones y esto te permitirá estar en el camino correcto para controlar tu peso y ganar la batalla psicológica que tiene a tu peso girando fuera de control. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X