La vida no es complicada Por Baba Shuddhaanandaa Brahmachari La vida no es complicada. ¡Nunca lo fue y nunca lo será! La vida es simple, espontánea, original y fluida, pero eso no es nuestra experiencia. ¡Parece ser un enigma y malabares! Aquellos que han practicado la meditación durante mucho tiempo y han llegado a un estado no tanto de la “práctica”, sino de “ser”, nos dicen que todas las complicaciones son nuestra creación. Todos sabemos que nuestros momentos más felices siempre vienen de las cosas más simples de la vida. Nuestro ego crea una gran cantidad de complicaciones día tras día. Podemos incluso hacer complicada nuestra relación con Dios. Hablamos de cómo Dios no está disponible para nosotros, como Dios no nos da lo que pedimos. Creemos que Dios favorece a alguien más porque tienen un trabajo nuevo o un coche nuevo. ¿Cómo podemos decir que Dios no habla con nosotros, pero es parcial y sí habla con otra persona? En primer lugar tenemos que detenernos en el hecho de que el dios de este universo no está ahí fuera, en alguna parte, sino que está en cada célula de nuestro cuerpo. No es más que un concepto de la mente que Dios está en otra parte – en los cielos, en el fondo de las nubes, lejos, muy lejos de nosotros – y que tenemos que llamar a Dios para que venga a nosotros, que nos bendiga y nos libre de nuestros problemas. Dios no está en ninguna otra parte. Dios está aquí y ahora. Si pudieras apretar todas las religiones del mundo y exprimir una gota de sabiduría, sería: Dios está aquí y ahora. . . en ninguna otra parte. La función de toda religión y de toda espiritualidad es cerrar la brecha ilusoria entre el buscador y lo Divino en el interior, entre el individuo y El Todo de la que todos somos inseparables. Nadie más crea esta distancia, nosotros la creamos. La distancia, la separación entre Dios y nosotros, la separación entre nosotros y toda la creación, es una ilusión de la mente. Esa ilusión puede ser terca. Esa ilusión puede ser convincente, pero también es la fuente de toda la miseria humana. El hábito de disipar la ilusión cada vez que surge es una práctica central y de importancia crítica para el buscador sincero. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X Maximiliano says: December 1, 2014 at 5:15 am beauty