También en las antiguas religiones Azteca, Maya, o del Hombre Rojo, (me refiero a “antiguas”, ya que los estudiosos coinciden en que sus descendientes actuales están demasiado contaminados con otras religiones como la cristiana, o incluso con movimientos espirituales New Age como para considerarlas como las auténticas) es decir en las antiguas culturas de todo el continente americano, sus propias teologías (más o menos evolucionadas) nos viene a hablar de la necesidad de que el Hombre, creyente, practicante o iniciado, transforme su vida hacia un “Despertar espiritual” para fusionarse o retornar a la Energía de la Creación.

De modo que de forma constante, nos encontramos en que el Hombre posee en su interior una Verdad, una Ley que forma parte del Orden del Universo y su sabiduría, la cual nos lleva y nos empuja a buscar dentro de nosotros mismos para modificar nuestro Yo, configurar nuestra intrínseca dimensión espiritual y experimentar de forma consciente nuestro Despertar espiritual. Si no pasamos por ese “peaje”, por esa experiencia a nivel personal, nos será imposible lograr un cambio colectivo. Todos los que somos coetáneos en estos momentos de la Historia del Hombre, tarde o temprano tendremos que pasar por este proceso de Despertar personal, eso si, sin coacciones de falsos profetas, y sin miedos a falsos infiernos. Nadie puede obligarnos o juzgarnos por el hecho de “como” o de “que forma” llevamos a cabo nuestro proceso. Pero de lo que si estoy seguro, es de que todos los que nos ha tocado vivir este Gran Cambio vibracional en el presente, es porque ya nos toca, en el Destino de nuestra Alma, realizar nuestro “Despertar espiritual” conscientes, antes de nuestro Transito a la Luz del Padre Creador.

Un abrazo de Luz!

David Escalante

Orientador Humano y Espiritual

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