Desarrolla tu intuición personal Por Lois Cheney ¿Por qué te debes preocupar por trabajar para encontrar y usar tu intuición? Porque concentrarte en conocer y usar tu “sexto sentido” puede traer beneficios diariamente en cuestiones grandes y pequeñas. La intuición es un don que todos tenemos y podemos decidir aumentar a través de nuestra intención y atención. La mayoría de nosotros hemos experimentado destellos de perspicacia de vez en cuando. Tal vez simplemente sabíamos quien estaba llamando cuando el teléfono sonó. Tal vez hemos recibido la impresión de que teníamos que hacer una llamada telefónica a un amigo o familiar que necesitaba que le dieran ánimo. La emoción de su dificultad llegó a nosotros sin el beneficio de una carta o una llamada telefónica. Aquellos de nosotros que tenemos hijos muchas veces hemos sabido lo que se necesitaba “arreglar” o lo que los estaba molestando mucho antes de que se intercambiaron algunas palabras. Simplemente lo sabíamos. Nuestra intuición nos lo dijo. Las relaciones de cualquier tipo parecen sacar lo mejor o lo peor de nosotros, pero ¿qué mejor lugar para practicar tus habilidades intuitivas? Prevenir los nervios de punta y los malestares emocionales en general mediante la comprensión del problema desde el punto de vista de los demás antes de hablar vale la pena el tiempo que extra que pasaríamos investigando mentalmente. Lo interesante es que mientras más atención le pones a tus intuiciones, en efecto felicitandote a ti mismo por prestar atención y tomar acción, ¡más serán las intuiciones que tendrás! Cuando tengas una duda acerca de seguir adelante con un plan o curso de acción, de negocios o personal, poder discernir el probable resultado o establecer alternativas mejores a través del descubrimiento “extra sensorial” es una ventaja. Puede evitar que pases por desvíos innecesarios. Los temas sobre los cuales puedes intuir son absolutamente ilimitados. Por ejemplo, supongamos que has estado tratando de elegir un nuevo proveedor de servicios de salud. Ya has reducido el campo a dos candidatos. Ambos parecen estar bien capacitados y cuentan con recomendaciones dignas de confianza. ¿Qué debes hacer ahora? Simplemente estar en silencio. Pregúntate a ti mismo, ¿qué sería la mejor opción para mis problemas de salud y para mí? Muchas veces tu ser intuitivo puede ver algunas de las cualidades fundamentales de los médicos que conscientemente no tengas conocimiento. Al recibir más datos, tu elección será más fácil y mejor. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X