La asistencia de las jerarquías solares

REVELACIÓN-RECEPCIÓN DE LA VENERABLE MADRE  NAH KIN

Frente a mi Santo Ser Solar están  8  Maestros Estelares,  se presentan como óvalos de luz radiante de gran magnitud en fulgor y tamaño; corresponde a Espíritus Rectores de los 8 soles más evolucionados de ésta galaxia.

Están aquí para asistir a nuestro sol (Kinich Ahau)  y a esta humanidad en los cambios que necesariamente tienen que llevarse a cabo en este tiempo.

Vienen con toda su potestad para romper la barrera de la tristeza, desolación y desesperanza que ésta humanidad ha producido. Ellos emiten sonidos armónicos de altísima vibración, el cual penetra en la atmosfera de la Tierra para aliviar el peso en los corazones y recrear un nuevo campo vibratorio, en donde cada persona se sentirá más confortable y la esperanza en un Nuevo Tiempo lleno de luz y amor, se hace posible.

Los Maestros Solares indican que la humanidad tiene que recordar que cuando cantan, se activa una vibración armónica que permite resonar con alegría y generar creaciones bellas.  Los cantos sublimes contrarrestan la aflicción del alma, sosegando al Ser y haciéndolo más permeable a la energía espiritual.

Los seres humanos nos tenemos que convertir en un terreno fértil donde germina la semilla de la esperanza, la semilla de la conciencia.  La conciencia que se experimenta plena, expandida en el espacio cósmico, que trasciende las circunstancia materiales; que es ilimitada.

En fundamental recuperar la maravillosa sensación de que somos trascendentes, que estamos mucho más allá de las circunstancias materiales.

Las más altas Jerarquías Solares nos ayudan a ubicarnos en una posición donde la creación que ejerzamos en nuestra vida va a estar relacionada con experimentarnos UNI-MULTIPLES; es decir, como un ser que es UNO con toda la Creación, y a la vez, experimenta las MÚLTIPLES DIMENSIONES simultáneamente.

Desde esa posición las ideas, las actitudes, las interacciones, tendrán un sentido completamente distinto porque sabremos de nuestro Ser Esencial, así como del camino de nuestra alma y el propósito de nuestra vida. El sentido que le daremos desde ese nivel a nuestros objetivos de vida va a ser esencialmente diferente.  Es necesario que cada Ser humano rompa sus propios límites para que experimente su multidimensionalidad.