Es bastante fácil de identificar aquellos sueños que no son en realidad sueños sino que son visitas claras de los espíritus. Por ejemplo, el espíritu de la abuela a quien tanto amabas cuando estaba viva podría llegar a ti durante la noche. Las visitaciones espirituales son fáciles de reconocer, ya que no vienen como un rompecabezas o una metáfora, sino que el espíritu se presentará exactamente como él o ella lo harían si estuviera vivo. Una visita de un espíritu se siente igual que se sintió cuando ustedes estaban juntos: el mismo tipo de conversación, redacción y sensación. Por lo general, habrá algún tipo de mensaje o consejo. Aunque muchas veces el propósito de la visita es simplemente consuelo emocional o una expresión de amor o perdón.

Si tienes alguna dificultad para recordar tus sueños (¡sabemos que todos soñamos todas las noches!) prueba esta solución simple. Antes de retirarte a dormir, di dentro de ti: “Esta noche voy a soñar. Adoro a mis sueños. Por la mañana voy a recordar el último sueño y lo escribiré.” Puede tomar dos o tres noches para instruir a tu subconsciente, pero tú ganarás. También es una buena idea darte las gracias a ti mismo o al creador de tus sueños por habértelos enviado. No sólo muestra tu apreciación, sino que también estimula la mejora de la “recepción”.

¡Les deseo sueños felices, productivos y llenos de información útil!

Más información acerca de la Reverenda Lois Cheney está disponible en www.SarasotaPsychicMedium.com, RevLois@gmail.com, www.MindfulHypnotist.com.

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