por Naomi McDonaldconsuelo-para-nuestras-mascotas

Muchos de mis clientes me hacen peticiones durante nuestras sesiones de comunicación con animales: “Por favor, dile a Sam (el perro, gato, iguana, etc.) que me voy fuera de la ciudad y pronto regresaré.” Por supuesto que sí se los digo, pero yo también quiero tranquilizar al dueño y decirle que su mascota va a entender completamente si les dan los detalles del viaje directamente a ellos. Cuando me miran con una expresión de “¡Tienes que estar bromeando!”, les explico una de las muchas lecciones que los animales me han enseñado en los últimos años y que describe en mi libro “They Sing to Our Hearts”.

Todo ser viviente está conectado por una red o matriz divina y es a través de esta matriz que compartimos información. Las palabras que decimos o las imágenes que formamos en nuestra mente comienzan como una intención en un nivel proverbial. En este nivel todo el lenguaje es el mismo y no se limita al espacio o el tiempo. También tiene su propia firma energética al igual que las ondas de un radio o un canal de televisión. Una vez que tengamos una relación con otro ser, los filamentos de la red que nos une son ligeramente ampliados. Además, entre más emoción viene de nuestro corazón a través de nuestros pensamientos e intenciones, más fuerte será la conexión. Este enlace de corazón a corazón es una de las conexiones más poderosas.

Un ser humano puede o no ser consciente de los pensamientos o emociones que envían por otro, pero los animales son mucho más receptivos y telepáticos porque sus receptores están siempre recogiendo las olas de nuestras intenciones. Nos demos cuenta o no, siempre estamos intercambiando información con ellos. No es inusual para un animal decirme que su persona se ha comprado un coche nuevo, ha pintado su casa o está preocupado por alguien. A menudo a mis clientes les sorprende que sus mascotas me informaran que van fuera de la ciudad antes que ellos me lo dijeran.

Así que si tú estás planeando un viaje o simplemente vas a la tienda de la esquina, explícale tus planes en voz alta a tu mascota. Entonces en algún momento durante el día o por la noche mientras estés  lejos de tu mascota, envíales pensamientos de amor y consuelo saludándolo en tu mente, o muéstrales una foto mental de ustedes juntos y diles cuándo vas a estar en casa. Por supuesto, lo mismo es cierto para todas las emociones, así que debes estar al tanto de cualquier miedo o ansiedad que puedas tener acerca de dejar a tu animal en casa, ya que seguramente va a percibir estos sentimientos.