Comprendiendo a la persona altamente sensible

por Sarah Nash Sydney

El siguiente artículo fue escrito por mi marido, que es una persona muy respetada dentro de la Comunidad PAS dentro y fuera del internet. Yo trabajo casi exclusivamente con PAS, porque yo los entiendo y hablo su “lenguaje” – Yo soy PAS.

“Soy una persona muy sensible.”

Hoy en día, públicamente puedo hacer tal declaración y no sentirme avergonzado o  prepararme para una avalancha de miradas o comentarios maliciosos de la gente que me rodea. Sin embargo, no siempre fue así.

La sensibilidad – emocional o de otro tipo – no es precisamente un concepto nuevo en el mundo. Tampoco era nuevo cuando la psicóloga Elaine N. Aron publicó el libro “La Persona Altamente Sensible” en 1996.  Lo que el libro de la Dra. Aron hizo fue brindar un poco de luz sobre un rasgo que afecta a un gran número de personas, pidiéndole al mundo a considerar la sensibilidad como un rasgo inherente físico, en lugar de una patología.

A pesar de que han pasado más de quince años – y el libro ha ofrecido profundas reflexiones personales de cientos de miles de personas – sigue  habiendo una buena cantidad de escepticismo de la sensibilidad como un “rasgo”.  Curiosamente, algo de este escepticismo se puede encontrar en las mismas personas que son altamente sensibles. Este escepticismo puede probablemente ser atribuido a una tendencia más amplia en la sociedad a “medicalizar” o “patologizar” muchas características de la personalidad que anteriormente eran consideradas como pertenecientes al ámbito de la experiencia humana normal.

Entonces, ¿qué es exactamente una PAS ?

La investigación de la Dra. Aron sugiere que aproximadamente el 15-20% de la población corresponden a la descripción de ser “muy sensible”.  PAS, por su definición, son personas cuyo cerebro y sistema nervioso están conectados de tal manera que son más conscientes de, y en sintonía con, ellos mismos, otras personas y su ambiente. Como resultado, una persona altamente sensible es más fácilmente estimulada y excitada por su ambiente, de lo que se deduce que también es más fácil que se estimulen demasiado. Esta sensibilidad es un rasgo innato que, curiosamente, los investigadores también han observado en las poblaciones animales que van desde los ciervos a los pulpos.

Por supuesto, el panorama inmediato que viene a la mente cuando la mayoría de la gente oye el término “altamente sensible” es el estereotipo de la “flor frágil” que es demasiado exigente, difícil de estar a su alrededor, y a quienes se les lastiman los sentimientos sin mayor esfuerzo.  Ciertamente, este tipo de sensibilidad emocional puede ser parte de lo que significa ser una PAS, pero no “define” el rasgo completamente.

La alta sensibilidad varía considerablemente de persona a persona, y se manifiesta de muchas maneras diferentes. Sí,  que alguien hiera fácilmente nuestros sentimientos podría ser una parte de la imagen. Pero hay mucho más. Las PAS son a menudo muy sensibles al dolor, y con frecuencia responden a dosis mucho más bajas de medicamentos que la mayoría de la gente. Ellos tienden a sobresaltarse fácilmente, y a menudo son abrumados por fuertes estímulos sensoriales. Tienden a ser cautelosos y altamente conscientes. Son fácilmente sacudidos y afligidos por los cambios, y no les va bien en situaciones donde tienen que enfocarse en varias cosas a la vez.   A menudo se ve afectada negativamente por los ruidos fuertes, olores y aromas fuertes, o las luces brillantes. Ellos tienden a ser “cooperativos” en lugar de “competitivos”. Ellos se agitan fácilmente en situaciones de estrés y por lo general funcionan mal cuando los están vigilando. Muchos son empáticos y con frecuencia sienten los estados de ánimo de otras personas, aunque muy pocos son dotados de una amplia gama de habilidades psíquicas. Casi todos dependen en gran medida de la intuición para aprender y funcionar en la vida. Incluso cuando son extravertidos, tienden a ser introspectivos, cuentan con una rica vida interior, y necesitan largos períodos de tiempo a solas para “recargar”. Las PAS también están desproporcionadamente atraídas por las artes y la música, y tienden a ser muy fácilmente conmovidos hasta las lágrimas por las expresiones de belleza e intensidad, así como las imágenes de horror y violencia.

Si algo de esto suena como algo que te pasa a ti, o a alguien que conoces, podrías considerar tomar la prueba de sensibilidad en el sitio de la Dra. Aron, en www.hsperson.com.

¿Qué es lo que NO es una PAS?

Una PAS no es, por definición, “una persona introvertida.” Considerando que el rasgo tiene una alta correlación con la introversión, aproximadamente el 30% de las PAS son extrovertidas.

Una PAS no es “una persona tímida.” Timidez es ampliamente reconocido como algo centrado en la auto-percepción – típicamente timidez excesiva, autoevaluación y auto-preocupación negativa irracional. Las personas no nacen tímidas, y los psicólogos han demostrado que en realidad no hay “sentido de sí mismo” antes de los 12 a18 meses. Por lo tanto, realmente no se puede nacer tímido.

Una PAS no es “socialmente ansiosa.” La ansiedad social es un trastorno mental / emocional, que por lo general es el resultado de algún tipo de trauma emocional o condición permanente que hace que las situaciones sociales sean particularmente difíciles para esa persona.  La ansiedad social gira en torno a los temores, mientras que una PAS se relaciona con los niveles de excitación del sistema nervioso. Cabe señalar, sin embargo, que debido a que las PAS tienden a ser introspectivas y más sensibles a los estímulos sociales, son algo más propensas a encontrar y negativamente internalizar situaciones que pueden llevar a desarrollar posteriormente la ansiedad social.

Una PAS no es, por definición, “neurótica”. Este es quizás el aspecto más difícil de explicar ya que, después de todo, la palabra “neurótico” está directamente relacionada con los trastornos del sistema nervioso, y ser muy sensible se refiere al sistema nervioso.  Así que debemos tener en cuenta cómo definimos las neurosis: Una enfermedad no-psicótica mental que provoca sentimientos de angustia y ansiedad, y da lugar generalmente a problemas de funcionamiento. Una manera de distinguir es recordar que las neurosis se centran en las respuestas patológicas, mientras que la sensibilidad representa respuestas sanas / normales, aunque posiblemente extremas.

Una PAS no es una persona con trastorno de Asperger (anteriormente el síndrome de Asperger). Considerando que existe una serie de coincidencias entre los criterios diagnósticos de Asperger (una forma de autismo de alto funcionamiento) y la descripción de alta sensibilidad, los dos no son lo mismo. Una PAS puede tener Asperger, pero al ser una PAS no significa que se tiene el trastorno. Tener Asperger no convierte automáticamente a alguien una PAS. Aunque a veces es difícil de distinguir a corto plazo, la Dra.  Aron señala que incluso los ejemplos más leves de Asperger tienen en su núcleo alguna forma de trastorno generalizado del desarrollo que simplemente no está presente en la mayoría de las PAS. Del mismo modo, la sensibilidad a la estimulación sensorial o el procesamiento sensorial sensible nunca se menciona en los criterios diagnósticos de cualquier trastorno del espectro autista, incluyendo síndrome de Asperger.

¿No es todo el mundo sensible?

La distinción importante que hacer aquí se centra en lo que constituye “un comportamiento” frente a lo que es un “rasgo fisiológico.” Estoy totalmente de acuerdo en que cualquier persona puede optar por actuar de una manera sensible. Por lo tanto, la respuesta a la pregunta anterior podría ser afirmativa. La principal diferencia es que una PAS no tiene realmente una opción. Piensa en ello a través de esta metáfora: independientemente de si les gusta el sol o no, algunas personas pueden salir a la calle en el verano y trabajar todo el día, y lo único que consiguen es un bronceado. Otros, en cambio (que pueden disfrutar del sol), obtienen quemaduras de tercer grado en una hora. Las PAS actúan de la manera que lo hacen porque sus cerebros están diseñados para responder de cierta manera.

Esto resulta especialmente importante cuando se trata de comprender las interacciones con una PAS. Muchas sociedades no valoran a la sensibilidad, porque vivimos en un mundo competitivo, sobre todo en la cultura occidental. Sea cual sea tu percepción de la sensibilidad, ten en cuenta que decirle a una persona muy sensible que lo “supere” y que “desarrolle una piel gruesa” es un ejercicio inútil. No se puede cambiar la forma en que su sistema nervioso responde de la misma manera en que no se  puede cambiar el color natural de tus ojos o el tamaño de tus pies.

Sincronicidad:  Mi propia iluminación

Como una persona altamente sensible, he estado estudiando e incorporando las características en mis opciones de estilo de vida durante casi 15 años. Yo supe de mi sensibilidad casi por accidente. Por supuesto, yo siempre había estado consciente de que era un poco diferente, pero yo luchaba por econtrar exactamente cómo.

Un día, me encontré hojeando la sección de viajes en una librería local. En un momento me encontré luchando por sacar una guía de viaje a Irlanda porque alguien había atascado otro libro en el estante encima de los otros libros. El volumen ofensivo no era un libro de viajes, sino una copia de “La Persona Altamente Sensible” que otro lector había dejado atrás.

Al principio, yo estaba a punto de tirar el libro, pero algo en la parte de atrás del libro me llamó la atención. Entonces me encontré con un cuestionario de autoevaluación en el interior del libro, a lo que respondí casi en un 100% por la afirmativa. Aunque me sentí un poco incómodo al respecto – soy un hombre que vive en Texas “donde los hombres son hombres” y estaba comprando un libro sobre ser sensible – compré el libro. Lo que siguió, al leer cada capítulo, fue un gran número de momentos “¡aha!” porque me di cuenta de que había un “nombre” por la forma en que siempre me había sentido un poco fuera de sintonía con lo que me rodeaba, y su causa no era algún tipo de patología o síndrome.

Desde entonces, he pasado mucho tiempo aprendiendo acerca de la característica y, posteriormente, informando a los demás.  El entender esta parte de mi rompecabezas personal hizo una gran diferencia en mi vida.  También he visto a muchas personas dar un suspiro de alivio y encontrar un nuevo significado y propósito en sus vidas como resultado de la comprensión de que no hay nada “malo” con ellos – simplemente son altamente sensibles.

¡Y tal vez tú también lo eres!

Peter Messerschmidt es escritor, buscador de playas, comerciante de sellos raros y eterno buscador.  Vive en Port Townsend, Washington con el gran amor de su vida y tres “niños” felinos “. Cuando no está paseando por la playa o por Internet,  facilita a grupos ( en línea y en persona) y retiros para las PAS, y escribe “HSP Notes” – el blog más antiguo de la PAS – en hspnotes.blogspot.com.

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