LA DIVINA TORMENTA

LA DIVINA TORMENTA

Por Nadia Ekatterina García

Pregunte antes de salir de casa: Madre tierra, padre sol, hermano árbol, enséñenme hoy ¿cómo puedo amar a alguien sin condición? y fue la lluvia fuerte, tormentosa, estruendosa y el viento huracanado que volaba las sillas y las mesas a nuestro alrededor quien me respondió:

“Si puedes mantenerte allí donde estas mientras todos corren, si puedes reír y disfrutar y sentir que el momento es perfecto porque te dejas afectar desde tu piel y tu útero con mi sagrado poder, te regocija mi sonido y el efecto visual que hago cuando caigo y el viento me mueve en espiral; entonces ya estas preparada para amar sin condición, porque amarás a todos como son y por lo que vinieron a hacer para que pudieras experimentar tus aspectos densos y luminosos.

Es porque ya te amas que puedes amarme sin importar el revoltillo que cause, sabes que yo soy tu, sabes que eres “Tormenta Auto-existente Azul” y que vienes aportando fuerza para el cambio, que tu misión es transformar todo a tu paso, iluminando la oscuridad, que tú misma has creado, solo para probar la luz del rayo y el sonido del trueno. Ya estas lista para probar en la forma, con las relaciones espejo tu poder de Diosa, porque a pesar de tu amor por mí, no deseas quedarte conmigo siempre.

Gracias por dejarme participar de ti”

Le contesté con una sonrisa, “no te deseo para mi amada tormenta, porque sé que eres parte de mí, y no tendría por qué cortarme en pedazos solo para verte morir a lo que eres. Gracias por participar de mí.”