Ho’oponopono: palabras que sanan Por Raquel Cabalga Como bien dice Anthony Robbins, el antepasado de todo acto es un pensamiento. Y es que nuestra mente es perfecta pero debemos comprender que las memorias que contiene no lo son, ni tampoco muchos de los datos con los que trabaja. Estos recuerdos quedan almacenados en el lóbulo frontal, a nivel inconsciente, y se imprimen con fuerza pues están relacionados con la emoción. La mayoría de las veces nuestros pensamientos hacen brotar emociones y de la repetición nacen las creencias. Otras veces, estas creencias son aprendidas durante la vida y ni tan solo nos hemos planteado sin son potenciadoras o limitantes, quién seríamos sin ellas o… ¡de dónde las hemos sacado! Para cambiar un patrón de comportamiento o actitud es muy importante la toma de consciencia: aceptando lo mencionado de forma precedente estaremos preparados para observar y cambiar. El Ho’oponopono es un antiguo método hawaiano de sanación que significa “corregir un error” o “hacer lo correcto” y nos enseña, precisamente, a desprendernos de esos pensamientos limitantes o emociones poco beneficiosas que causan un desequilibrio en nosotros mismos y, consecuentemente, en nuestro entorno. Esta técnica ancestral puede ser usada por cualquier persona sin importar su edad o su cultura con el fin de traer paz y equilibrio de una forma simple y efectiva, mediante la limpieza física, emocional y espiritual a través de un proceso de arrepentimiento, perdón y transmutación. La sanación del inconsciente se consigue partiendo de que todo ocurre dentro de nosotros mismos, asumiendo toda la responsabilidad, encontrando nuestra verdadera identidad y llegando a la sanación propia gracias a la introspección y el borrado de patrones. Así lo demuestra la historia del Dr. Ihaleakala Hew Len, terapeuta hawaiano que sanó a todo un pabellón de enfermos criminales peligrosos en el Hospital Estatal de Hawaii sin haberlos visto nunca, trabajando únicamente sobre sí mismo y los expedientes de cada interno. Los conflictos y ausentismo en el ámbito laboral desaparecieron, así como lo hizo dicho pabellón a causa de la sanación y liberación de sus internos. En ese momento, se hizo patente que la total responsabilidad se extiende a todo lo que está presente en nuestra vida, simplemente porque está en nuestra vida y es nuestra creación. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X