Relajarte y tomar tiempo para ti mismo es vital. Muchas veces nos da la “enfermedad de la prisa” y quedamos atrapados en lo que “debemos hacer”. Toma algunas respiraciones profundas, relájate y disfruta del presente.

También es importante contar con una auténtica conexión con tu pareja. Para que alguien se relaje a tu lado, tú debes ser capaz de confiar en ellos y permitirte ser vulnerable. Personalmente, yo siento que el sexo casual está vacío y no tiene sentido para muchos de nosotros; además, complica las cosas para nosotros al enredar nuestra energía con aquellos que no desean verse seriamente conectados. Cuando se piensa en ello, el hecho en sí mismo es una fusión de dos seres en uno. Por lo tanto, elege sabiamente con quien compartes en la intimidad. Cuanto más conectado estás espiritualmente con tu pareja, más placer experimentarás.

Toma tiempo cada día para alinear tus chakras. Cuanto más claro estén “tus cosas”, más cerca estarás de regresar a la unión divina. En última instancia, todos lo queremos pero ¿lo quieres lo suficiente como para hacer el trabajo?

La madre naturaleza también puede dirigirte a un aumento de la libido. Aquí hay algunos consejos naturales para elevar tu unión:

Apio: El apio se ha considerado muy útil cuando se trata de mantener una buena relación sexual. Es un afrodisiaco que aumenta el deseo sexual y estimula las glándulas sexuales. Los romanos dedicaron el apio a Plutón, su “dios del sexo”. También se ha observado que el apio libera una feromona que atrae al sexo opuesto. El apio te hace sexy. Incluso Casanova incluía el apio en su dieta.

Damiana: Infúndela en vino para una noche de diversión o utilízala en una mezcla de té. La damiana actúa directamente para aumentar el deseo sexual e incluso la intensidad de las sensaciones subjetivas durante la experiencia sexual. Se la conoce como el remedio del “amor vertiginoso”.

Mosca española: Se ha sabido por muchos años que la mosca española aumenta el deseo sexual, despierta la libido femenina e incluso mejora el orgasmo femenino. Se puede mezclar en el alimento o en las bebidas.