Deja las puertas abiertas para la próxima Así es que vayamos abonando poco a poco… no esperemos que lleguen a cobrarnos o que nos demanden. Evitemos la vergüenza. No dañemos esa idea bonita que tienen de uno; cuesta edificarla, construirla, mantenerla orgullosamente en lo alto y, sin embargo, puede venirse abajo en un abrir y cerrar de ojos. Todos tenemos necesidades. Hay personas quienes anhelan vender sus productos de prestigiadas marcas para recibir regalos a cambio o ganancias en efectivo pero nunca falta quienes hacen pedidos, reciben el producto y ya no lo pagan. ¿Les gustaría pasar por lo mismo? ¿Ofrecerle tu amistad a alguien y que te traicionen así? ¿Creen que es justo? Mejor evitemos hacer gastos excesivos o que no son necesarios y pongámonos como objetivo pagar aquello para que esa estimación hacia uno, regrese. Comparte esto: Click to share on Facebook (Opens in new window) Facebook Click to share on X (Opens in new window) X