4. Cocina comida verdaderamente deliciosa. No te limites a comer zanahorias todo el día, hay tantas recetas increíbles llenas de sabor que hay por ahí. Haz clic aquí para ver algunas.

5. Come lo que tus hijos están comiendo. No tengas comida para adultos y comida para los niños. Los niños siempre quieren comer lo que comes así que si comes sano ellos te seguirán.

6. No te preocupes por ofender a nadie. Si tú no quieres que tu hijo coma un pedazo de pastel en una fiesta, no hagas una escena. Sólo asegúrate de empacar una alternativa para que tu hijo no se sienta como que está perdiéndose de algo.

7. Empaca unos bocadillos. Cada vez que salgas o lleves a tus niños de visita con un amigo, empaca bocadillos saludables. Debes estar listo para cuando tu hijo tenga hambre y como algo de lo que no te sientas cómodo que estén comiendo. Los platanos y las galletas Powerball funcionan muy bien en nuestra casa.

8. Siempre lleva un platillo. Si estás invitado a la casa de alguien o a una fiesta, lleva un platillo de comida sana contigo. Lleva algo que tú hayas cocinado y que sabes que todos disfrutarán. Puede incluso convertir a algunas personas en amanes de la comida sana cuando prueben tus delicias caseras.

9. Haz consciente a la gente de lo que permites que coma tu niño y lo que no está en el menú. Si tus hijos son pequeños, puede que prefieras que la gente te pregunte antes de darle a tu hijo cualquier alimento. La gente no sabe exactamente qué pautas dietéticas has hecho para tu familia así que se las puedes decir amablemente.

10. ¡Disfruta de ser un padre súper saludable y está muy orgulloso por hacer lo que sientes que es mejor para tus niños!

Conéctate con Sheleana y Caleb en: http://www.youngandraw.com.

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